14 Palabras para Kurosaki Ichigo

Chapter X.- Oso

Kurosaki Ichigo miro con atención el reloj despertador al lado de su cama, sobre su buró. Las tres de la madrugada. Volteo su mirada adormilada a su mujer acostada junto el en su cama y dio un largo y cansado suspiro… Que vida…

-Son las tres de la mañana…-Murmuro con sueño.

-¡Pero…!-

-¿De donde quieres que saque esas cosas a estas horas?-

-¡Sambors esta abierto!-

-Rukia…-Poso su mano en su frente en señal de cansancio.-… Te recuerdo que tengo que ir mañana al hospital y tú con estas cosas a estas locas horas…-

Rukia le miro con rogar. Ichigo trago saliva, odiaba cuando hacia eso. Miro hacia abajo cuando sintió que su esposa tomaba su mano y la posaba en su barriguita abultada a mas no poder y una patadita del bebe dentro se hizo presente. Rukia sonrío al ver la expresión de sorpresa del joven doctor. A Ichigo se le erizo la piel al sentir el movimiento del bebe…

-¡¡TU BEBE TIENE HAMBRE!!-

Ichigo dio una todavía más laaaaaaargo suspiro del que dio anteriormente. Rukia seguía lloriqueando algo sobre tener antojo de chocolate… después dijo algo sobre un consomé de pollo… helado de vainilla… fresas con crema… pescado a la plancha… puré de papa… en fin, todo un menú. Al pobre Kurosaki le daba mil y una vueltas la cabeza y ya no sabia que hacer. En esa semana era la QUINTA VEZ que ella le despertaba a malas horas de la noche pidiéndole cualquier estupidez, cabe destacar que estaban a miércoles… ¡¡A PENAS!! Su bebe era muy exigente. Oh, Dios… Kurosaki al fin y al cabo…

-Ichigo…-Ella seguía rogándole.

Estaba ya en el noveno mes, poco faltaba ya para nacer su bebe. Rukia estaba insoportable para cualquiera… menos para Ichigo, al fin y al cabo es su esposa. Lloraba por cualquier cosita, su instinto de madre salía a cada minuto, todo se le antojaba, estaba demasiado cariñosita y con un hambre de los mil demonios. La cartera de Ichigo y su cuenta en el banco lloraban al verse atacadas por Rukia y el bebe, Ichigo era realmente débil ante ellos… bueno, ellas.

-Esta bien…-Se puso de pie ante la miada triunfadora de Rukia.-¿Qué es lo que quieres?-

-¡¡Fresas con crema, miles de chocolates, un consomé de pollo, helado de vainilla y también de fresa, fresas con chocolate, un Browne, un pie de queso y un oso de peluche!!-Rukia se hincó en la cama para recitarle TODO lo que quería y que seguro después no se comería, aun así, Ichigo lo compraría… Ichigo empezó a ponerse unos pants para salir a sus comprar “despertinas”

-Claro, claro… fresas con crema, chocolates, consomé de pollo, helado de vainilla y fresa, fresas con chocolate, Browne, pie de queso, oso de peluche… ¿¡UN OSO DE PELUCHE!?-

-¡Si! Creo que ha nuestra bebe le agradara mas un oso de peluche que otro Chappy… ¿Sabes cuantos Chappys tiene ya?-

-No se, Rukia…-Ichigo reviso su cartera. Genial, tendría que pasar al cajero automático también.

-¡¡DOCE!!-A Ichigo le tembló la espina dorsal al escuchar eso.-Cuatro que eran míos, dos que le regalo Rangiku-chan, uno que le regalaron Urahara-san y Yoruichi-san, otro que le dio Orihime-chan y Uryuu-kun y los cuatro que venían en el paquete que compraste ayer…-

-Que me mandaste a comprar ayer…-La corrigió Ichigo.

-Bueno, pero tu los compraste…-

Ichigo dio otro suspiro loco. Rukia seguía hablando sobre los juguetes de su niña, estaba emocionada. Ichigo volteo a verle y la vio con ternura. A pesar de que no pudiera dormir del todo bien, valía mucho la pena. Ver la cara ilusionada de su esposa y su abdomen abultado era lo que le daba fuerza para seguir y pronto podría tener entre sus brazos a su hija. Se acerco a una contenta Rukia para despedirse y salir a su rondina nocturna de todos los días. Rukia le miro curiosa.

-¿Qué sucede?-Pregunto cuando poso una mano en su cabeza.

-Nada… si pasa algo, llama primero a mi papa y después a mí, ¿ok?-

-Claro…-Ichigo le acerco el celular.

-Ten el teléfono a la mano, sabes que en estas semanas Masaki nacerá, así que estate quietecita… ve tele un rato si quieres…-

-¿Seguro que estas bien?-Le miro con ternura, tomando su rostro entre sus manos.-Sabes que siempre estoy al pendiente, no soy tan tonta… soy mas humana que cuando nació Kaien…-Le recordó.-Además, no es la primera vez que tengo un bebe, ya se que es una contracción, tarado…-

-Bueno, pues…-Ichigo beso su frente-Te amo.-

-Yo también…-

-¡¡Mami!! ¡No puedo dormir! ¡Hace rato papa grito mucho!-La puerta de la recamara de ambos se abrió y entro un pequeño niño que bien podría ser confundido con Ichigo de pequeño, solo que tenia el cabello negro.-… Además, Kon y Pyohn hacen ruidos raros…-

-¡¡ICHIGO!!-

-¡YA VOY!-

-¿eh?-

-No es nada Kaien…-

-Pero…-

-¡¡KON, PYOHN!!-

-Ore…-

-¡¡Ichigo, no grites!! ¡¡Kaien puede escucharte!!-

-Pero de todas formas no entiendo…-

-¡¡JODERRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRR!!-

--End xD--